Recientemente, en costas de México, bañistas reportaron el hallazgo de un ejemplar, lo que ha generado revuelo en redes sociales y medios de comunicación. Científicos, sin embargo, argumentan que no hay evidencia concluyente que relacione la presencia del pez remo con fenómenos sísmicos.
Según estudios, estos peces podrían acercarse a la superficie debido a cambios en las corrientes oceánicas, alteraciones en la temperatura del agua o enfermedades que afectan su navegación.
A pesar de la falta de pruebas científicas, el misterio que rodea al pez remo sigue vigente. Su inusual apariencia, su hábitat poco conocido y su asociación con desastres han convertido a este pez en un símbolo de lo desconocido. Mientras la ciencia sigue investigando su comportamiento, las comunidades costeras continúan observando con atención, temerosas de que su presencia pueda anunciar lo inevitable.