EL AUMENTO de robos han encendido las alarmas en Bogotá, cuyos habitantes afirman que se sienten cada vez más expuestos a la delincuencia en las calles sin importar la hora y el lugar.
El número de casos reportados por las instituciones como Probogotá se ha convertido en materia de análisis y discusión, sobre todo a poco menos de seis meses para que la alcaldesa de la ciudad, Claudia López, culmine su administración. Consideran que la gestión actual ha sido poco efectiva en materia de seguridad.
Al respecto, Hugo Acero, experto en seguridad y justicia, destacó a EL NUEVO SIGLO que ha habido un incremento considerable de hurtos a personas, siendo ese uno de los temas que más preocupa a los capitalinos. Informó que entre el 1 de enero y 14 de julio del año pasado se registraron 61.401 hurtos, mientras que para la misma fecha del año actual se reportaron 77.991, lo que representa un aumento de 27% de este delito.
“Cuando se les pregunta a los ciudadanos qué es lo que más le preocupa al salir a las calles, la respuesta que más se repite es ser víctima de hurto”, manifestó el experto, quien también denunció que son las zonas comerciales más concurridas como las del centro de Bogotá, Chapinero, Galerías, Restrepo, Venecia y Suba donde existe el mayor número de incidencias, precisamente porque concentra grandes cantidades de personas.
Adicionalmente, destacó que, aunque el número de casos ha disminuido en las últimas semanas, en las estaciones y buses de Transmilenio existe una gran probabilidad de que una persona sea víctima de robo, sobre todo en las horas pico. Según Acero, la modalidad más utilizada por los delincuentes dentro del sistema del transporte público es el ‘cosquilleo’.
Los motivos
Acero vinculó varios elementos al incremento del delito de robo y hurto a personas que tanto preocupa a los ciudadanos en Bogotá. El primer factor ha sido la aglomeración de personas en un mismo lugar, que facilita a los delincuentes arrebatar las pertenencias de sus víctimas.
También aseguró que, como segundo punto, está la vinculación de cada vez más jóvenes en este tipo de actividades, por lo que hizo un llamado de atención a las instituciones para atender a la población joven y más vulnerable antes de que decidan incurrir en este tipo de actividades ilícitas.
Como tercer factor, mencionó que existe una mínima proporción de migrantes venezolanos que ha optado por participar en actividades de este tipo, al igual que en otros delitos como el microtráfico.
“Hay que reconocer que la gran mayoría de migrantes es gente honrada y trabajadora, pero en cualquier proceso migratorio, también migran algunos delincuentes que vienen a hacer daño al país”, aclaró el experto en seguridad y justicia.
Sobre lo que se requiere en la ciudad para controlar la situación, respondió que mayor control policial. “Pero no estamos hablando de policías sentados en los CAI esperando a que los llamen, sino de los que salen a patrullar de manera permanente”, apuntó.
De igual manera, también dijo que “hay que sacar a más policías a las calles, sobre todo donde hay más concentración”. Adicionalmente, habló sobre la necesidad de mejorar e incrementar el número de cámaras de videovigilancia para monitorear algunos sectores considerados puntos rojos y la actividad realizada por algunas personas.
Como cuarto elemento para mitigar el número de incidencias por hurtos, consideró necesaria la participación de los ciudadanos, sobre todo los que son víctimas del flagelo. Habló de la importancia de denunciar, pero también enfatizó que muchos no lo hacen por temor.
“Además de la participación, se requiere de la organización ciudadana. Debe fortalecerse el trabajo de organización comunitaria. Esto, con mayor participación y policías en la calle, el delito bajaría”, señaló.
Modalidades
Según cifras de la Secretaría Distrital de Seguridad, Convivencia y Justicia, los hurtos son los delitos con mayor recurrencia en Bogotá, después de homicidios, extorsión y lesiones personales.
Las modalidades de hurtos con mayor incidencia son las de automotores. Solo este año se han reportado 2.040 casos, lo que representa 46,4 incidencias al día.
Luego, está el hurto a motocicletas con 13,5 casos al día. Entonces, en lo que va de año ha habido un total de 2.641 casos. El hurto a personas es la modalidad con mayor denuncia y solo este año ha habido 77.991 casos; es decir, 400 por día.
Por último, están los robos a residencias y a comercios, los cuales han registrado 4.059 y 5.741 casos, respectivamente, durante este primer semestre de 2023.