En Valencia, la zona más castigada por el impacto de las lluvias y las inundaciones y donde han fallecido al menos 92 personas, los bomberos siguen trabajando fundamentalmente por tierra, en las labores de limpieza y desescombro en las zonas afectadas, sin que esté previsto este jueves la salida de medios aéreos, informó el Centro de Coordinación de Emergencias del gobierno valenciano.
En la actualidad, más de 447 personas de las poblaciones más afectadas por las inundaciones siguen alojadas en albergues y el 112 ha atendido, desde las 22:00 horas del miércoles, 21 casos de abastecimiento de suministros de necesidad.
Aún hay núcleos de población sin electricidad e Iberdrola ya ha repuesto el suministro a 42.000 de los 155.000 afectados en Valencia por la dana y ha insistido en que seguirá haciéndolo a medida que los operarios puedan entrar en las instalaciones.
En otras zonas afectadas del territorio como Albacete, en Castilla-La Mancha -centro de España- (donde han fallecido dos mujeres), continúa la búsqueda de cinco personas desaparecidas en Letur tras haberse reanudado las tareas a primeras horas de este jueves para peinar el cauce natural del arroyo que se desbordó el martes.
En la Comunidad Valenciana, está prevista este jueves una nueva reunión del Centro de Coordinación Operativo Integrado (CECOPI) tras la cual comparecerá el presidente del gobierno valenciano, Carlos Mazón. Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, visitarán dicho centro para conocer el estado de las labores de emergencia.
Desde el Gobierno español, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, aseguró que las predicciones y análisis funcionaron “perfectamente” pero “los mecanismos de respuesta” no incorporaron de manera adecuada las alertas.
“Los mecanismos de predicción y de análisis han funcionado perfectamente, han sido capaces de prevenir con días de antelación lo que va a suceder; sin embargo, los mecanismos de respuesta posteriores han sido los que no han incorporado adecuadamente esos mensajes de alerta”, dijo a EFE desde la COP16 de Biodiversidad que se celebra en Cali (Colombia).
“Esos fenómenos naturales con los cuales estábamos acostumbrados a convivir están adquiriendo unas dimensiones que son desconocidas y que los mecanismos de respuesta no están adecuados para esas dimensiones”, añadió Morán.
Según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología, las lluvias torrenciales de las últimas horas comienzan a perder intensidad y extensión, aunque todavía este jueves doce provincias continúan en alerta y especialmente Tarragona y Castellón, con nivel naranja riesgo importante ante acumulaciones cercanas a 40 litros en una hora o 100 litros en 12 horas.
En Valencia, donde el nivel de riesgo ha llegado a ser extremo, este jueves solo se mantiene el aviso naranja (riesgo importante) en la provincia de Castellón, especialmente zonas del litoral e interior norte y por tormentas, según la Aemet.
Cataluña (noreste), muy castigada también por la dana, sigue con alerta naranja en el prelitoral y en el litoral sur de la provincia de Tarragona; en el resto de la comunidad, salvo Lérida, el aviso es amarillo (riesgo para ciertas actividades por acumulaciones entre 30 y 20 litros en una hora y por tormentas.
En Andalucía (sur), donde ha fallecido un hombre, las lluvias también ceden tras la fuerte intensidad de las últimas horas y solo las provincias de Cádiz, Sevilla y Huelva siguen en alerta amarilla por precipitaciones, que dejarán entre 15 y 20 litros en una hora.